Los sátiros son criaturas de la mitología griega con el torso de un hombre pero con la mitad inferior y cuernos de una cabra.
Estos son a menudo representados como criaturas borrachas, libidinosas que con frecuencia perseguían a las ninfas debido a su belleza. A veces están asociados con los dioses Pan y Dioniso. Uno de los sátiros más famosos era Sileno, quien era un discípulo de Dioniso.
Estos seres eran usualmente representados con un tirso, el cual es un tipo de bastón de madera terminado en una piña de pino.
Historia
Los sátiros aparecen por primera vez en literatura griega alrededor del siglo VIII a. C. Hesíodo, Ovidio y otros autores escribieron acerca de las fiestas salvajes, las broncas y las aventuras de estas criaturas.
Posteriormente, en la mitología romana, se les comenzó a llamar faunos y es quizá más popular el uso de esa palabra actualmente que su versión griega.
Las obras de sátiros eran un género establecido en los antiguos dramas griegos. Aunque había unos cuantos, no todos han sobrevivido. De hecho, solo existe uno que ha sobrevivido. Se dice que Esquilo escribió unas cuantas obras, pero ninguna ha sobrevivido a nuestros días.
Como se puede apreciar, estas criaturas fueron una parte de la mitología griega. Y aunque no fueran tan importantes como los dioses, tenían su lugar en las historias.
Los sátiros en el arte
En la famosa película de Disney «Hércules» aparece esta criatura. Se trata de Filoctetes, el gruñón entrenador personal de Hércules que le acompaña en su ejercicio.
También eran muy populares en la cerámica ateniense de figuras rojas. Durante el siglo V y VI a.C. se hicieron innumerables diseños incluyendo sátiros tocando la flauta o llevando sus botas de vino.